A los 40 ladrones no los he visto, todo viene de mi gusto por la cerámica de Marruecos y a la relación especial que guardo con "El Jefe"", que lo denomino así porque en verdad no tengo ni idea de como se llama.
Conocí su alfarería por casualidad en un viaje a Fez hace unos años y desde entonces la visita es obligada e ilusionante, siempre que voy paso por el barrio de los alfareros a ver que tiene. Está por allí casi siempre, vigilando al personal dando ordenes a unos y otras, no habla nada de español y nos entendemos por señas, a la hora del regateo casi es inflexible, da igual que le pase la mano por el hombro, que le ofrezca un cigarrillo, que le diga lo que le diga... él me entiende, me echa una sonrisa y a otra cosa.
Me deja entrar en la cueva de Ali-Babá asi la llamo que es su almacén abarrotado de platos, de jarrones, de tibores, de todo. Si muestro interés por algo no hay problema, llama a los chicos y en un abrir y cerrar de ojos la pone patas arriba y me busca aquello que me gusta.
Yo estoy encantada y la verdad es que no sé comprar en otro sitio que no sea este por más que lo he intentado, sus dibujos, sus formas, sus colores, su sonrisa y hasta su picardía hacen de mí su mas fiel admiradora y él lo sabe.
Cuando voy a Marruecos me viene a la mente siempre la misma imagen, murallas, zocos, medinas, hornos humeantes y la Cueva de ALÍ-BABÁ.
Si me preguntais donde está la alfarería del "Jefe", que calle, que número, ni idea, solo puedo decir que se ir, que el camino me lo sé de memoria, que nunca me pierdo, que se va saliendo de Fez el Bali hacia la carretera de Taza. Cuando veais humos negros en el cielo habreis llegado al barrio de los alfareros. Allí en una calle muy ancha, bajando a mano derecha está. Sus piezas reconocibles os dirán que habeis llegado.
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